Los tapones afectan la salud emocional
Salir a las calles en horas de la mañana, el medio día o las seis de la tarde se ha convertido en un dolor de cabeza para los conductores. El embotellamiento del tránsito genera estrés, ansiedad y, muchas veces, agresividad.
Cuando las personas experimentan sentimientos como esos hay menor capacidad de razonar, y al no controlarlo se cae en infracciones de la Ley, agresión verbal y una reacción negativa ante la situación.
Luis Molina, vicepresidente ejecutivo de la Alianza Dominicana a Favor de la Seguridad y Movilidad Vial (Avial) asegura que más allá de lo económico (que significan millones y millones) los “tapones” tienen gran impacto en la sociedad; en la manera en que los choferes interactúan unos con otros, y generan una espiral de violencia sin límites.
De acuerdo con el experto el tránsito congestionado afecta la salud pública, “eso incluye la estabilidad mental, afecta el desenvolvimiento de la sociedad en todos los niveles. Estamos hablando de que una persona que sale de su casa y dura dos horas para llegar. Cambia la forma en que pensamos, en que salimos”.